La semana pasada estuve en la presentación de un libro de varios autores
sobre el presente y el futuro del UE. Allí he tenido la oportunidad de hablar
con una muy conocida eurodiputada. Una de las preguntas mías fue ¿porque no
copiar simplemente el modelo político de la Confederación Helvética y aplicarla
a toda Europa (cuatro pueblos con cuatro idiomas distintos y los 300 años de
historia)? La respuesta inmediata fue "hay diferencia de escala, la Suiza no es el modelo porque es muy
pequeño" (como si el tamaño importa!).... después, como señal de final de
la conversación y desviando sus ojos de mi, pronuncio "además en Europa no
quieren ni oír la palabra federación y aun menos la confederación"…
Esto fue toda una revelación para mí. Si no quieren construir ni una federación
ni una confederación solo queda... EL IMPERIO y sabiendo que uno de
los fundadores es Francia, entiendo que quieren restaurar el Imperio (igual que Napoleón en su tiempo).
Los fundadores del Mercado Común han empezado desde la abolición de las
barreras aduaneras y económicas permitiendo que las compañías de carbón alemanas
pudieran fusionarse con las compañías de acero francesas y así desaparecía la
principal fuente de las tensiones entre dos países. Es decir que empezaron por
la abolición de las barreras económicas construyendo un Marco Legal Común. A
diferencia de los padres-fundadores los actuales políticos solo persiguen un
objetivo: apropiarse del poder paneuropeo para “hacernos felices”… lo queremos
o no.
Los políticos de hoy día en Europa no entienden lo más básico: la base de
toda la sociedad es el Marco Legal. No podrán construir -por lo menos sin
sangre- ni el Imperio, si a nivel de
Europa los pueblos no se pondrán de acuerdo en entrar en un Marco Legal Común
(leyes+jueces+policía), los atributos externos tales como el Parlamento, la
democracia, la moneda única son solo unas superestructuras sobre la base que es
el Marco Legal.
Esto no es un marco legal común.